BEL DIVIOLETA: Primavera de otoño – SAM COOKE: Wonderful World

BEL DIVIOLETA: Primavera de otoño – SAM COOKE: Wonderful World

LA POSIBLE COPIA

 

BEL DIVIOLETA: Primavera de otoño

httpv://www.youtube.com/watch?v=Wdd3IBfAXLc

 

“Primavera de otoño” era una de las canciones que se incluían en el primer álbum de la formación Bel Divioleta, titulado Espejos y publicado en el año 2005 por la discográfica Siesta. Así se presentaba entonces el disco:

 

“El escaparate de Siesta levanta su cierre para mostrar el pop de pureza impenetrable de Bel Divioleta, alías artístico de la más lolitesca de las componentes de Las Escarlatinas. Sí, ya saben ese cuarteto que ha realizado un giro copernicano en el patio musical en 2005 con el celebrado disco “A todo color”. “Espejos” es una colección de ficciones, laberintos y ensueños, imponentes fogonazos de pop en súper 8, vanos sueños de salón silencioso de otro siglo, mundos insólitos y fugitivos, paraísos desdibujados por el gris plomo de la ciudad y la sempiterna vaciedad del mundo que nos rodea….

 

Si Las Escarlatinas son los “buenos días” felices del pop, Bel Divioleta es las “buenas tardes” del pop melancólico y visto desde una ventana empañada en otoño. “Espejos” enardecerá al apagado público y atraerá la atención del oyente distraído o inapetente. Puestos a exagerar, se le hace a uno fácil reconciliarse con su pasaporte español. Tras escuchar el disco se puede decir que el pop en España recobra buenos aires con un trabajo perdurable.

 

Bel Divioleta a través de sus apariciones puntuales en fantasías del termitero de esta casa se había ganado ya fama de icono de minorías, en un misterio de esfinge. Callada hasta el férreo hermetismo, esta pequeña estrella debía retornar con el oropel de un larga duración para demostrar que no era un espejismo o simple humo.

 

Hasta el bueno de John Peel (q.e.p.d.) quedó prendado con su voz y empatía y programó con insistencia sus temas. Incluso nobles eminencias musicales del país insistían en sacar a esta joven madrileña de la infernal oscuridad. El momento de desarbolarles a todos llega por fin aquí, agárrense que vienen curvas.

 

Con la mejor cortesía se ha tratado de corresponder a Belén, felina y encantadora a partes iguales, con una producción pizpireta y nostálgica de Ramón Leal y Mateo Guiscafré. En la concepción del disco éste último recurrió a compositores de similar longitud de onda como la enigmática y sorprendente Violeta Gómez, el geniecillo versátil Alberto Matesanz (Mate, Plastic D’amour), el excelso artesano pop Miguel Ángel Villanueva (Los Brujos), el insigne letrahérido Fernando Márquez El Zurdo, el escapista con chaqué Sergio López De Haro ( Kikí D’akí). Hay además tres adaptaciones al español de temas de cabecera pero poco trotados por estas latitudes.

 

El disco contiene canciones que podrían hacer las delicias de los incondicionales de Las Escarlatinas pero “Espejos” añade un punto de fatalidad, resignación y tristeza a las risueñas sonatinas. Claro, Belén se envalentona con hits verdaderos y explosivos hechos a su medida como “Tokio”, “Normal” o “Desayuno en Tiffany’s”, pero gravita también vaporosa en joyas más clásicas con el encanto de todo lo femenino como “Criticarán”, “El amor mancha”, “De ficciones”, “En blanco” o “Imprevisible” y se empapa de lágrimas que no reniegan de ese mal fantasmal que es la melancolía en cortes como “La ventana”, “Mucho tiempo más”, “Fantasmas del súper 8” o “Primavera de otoño” (canción ideada para Jeannette). El disco a veces muestra un vago sabor de infancia y tiene un ambiente medio luz, medio sombra que da como frescor y acogimiento.

 

Belén tiene una voz especial. Entre France Gall, Astrud Gilberto, Jeannette o Claudine Longet, dirán algunos sabihondos. Preferimos pensar que está aureolada por algo indefinible que sólo puede venir de las cavernas del alma. Nuestra cenicienta sabe que no levantará polvareda pero que será celebrada por aquellos que contemplan la vida desde una esquina. Tiene una profunda y rica vida interior y sus sentimientos han permanecido precintados demasiado tiempo. Es el momento de suicidarse musicalmente como esas ballenas que se lanzan sobre las playas. Así son las cosas.

 

Bel Divioleta quizás pase de puntillas en este tiempo y es que la realidad es desdichada, injusta y dura. Pero este disco llegará muy hondo, eso esperamos. Y no olviden que los espejos nos dan una óptica diferente. Recuerden que el hombre no ha hecho cosa más misteriosa y hermosa jamás. Ni más coqueta, ni más alegre ni más seria si llega el caso. Como este disco”.

 

Esta es su letra:

«Lloverá por la noche
golpearé tus cristales
pero sabes que ya será el final

Y después de la lluvia
sonreiremos alegres
con los ojos en rojo de llorar

Será como una rosa
que se abre despacio
y que ya nunca más se cerrara

Llegará un nuevo mayo
al salir del otoño
y en la aurora feliz nos besara

No será nada fácil
tanto tropezaremos
y habrá días que no nos brille el sol

Pero no volveremos
a la nada de siempre
porque recordaremos el dolor

Será como una rosa
que se abre despacio
y que ya nunca más se cerrara

Llegará un nuevo mayo
al salir del otoño
y en la aurora feliz nos besará…»

 

EL ORIGINAL

 

SAM COOKE: Wonderful World

httpv://www.youtube.com/watch?v=R4GLAKEjU4w

 

“Primavera de otoño” de Bel Divioleta tiene una construcción muy similar al clásico “Wonderful World” de Sam Cooke, canción escrita a finales de 1959 por Sam Cooke en colaboración con los compositores Lou Adler y Herb Alpert. Atribuida en un principio a Barbara Campbell, nombre de la novia de Cooke en el instituto, fue grabada en 1959 aunque fue editado como single el 14 de abril de 1960.

 

El lanzamiento llegó después de que el Presidente de su compañía, Keen Records, descubriera la grabación en una maqueta que Cooke había hecho el año anterior, el 5 de marzo de 1959, cinco días después de haber finalizado su disco con canciones de Billie Holiday Tribute to the Lady. La intención era contrarrestar la publicación con otra canción de Cooke, “You Understand Me” que aparecía en otra discográfica al mismo tiempo, RCA.

 

A mediados de los 60, Herman’s Hermits la llevó también al éxito. También fue grabada por artistas como Art Garfunkel, Bryan Ferry, Otis Redding, The Supremes, Rod Stewart, Sam & Dave, Paul Rodgers, Aretha Franklin, Desmond Dekker o Hank Snow.

 

Esta sería la traducción de su letra:

“No sé demasiado acerca de la historia
No sé demasiada biología
No sé demasiado sobre el libro de ciencia
No sé demasiado acerca del francés que estudié.

Pero sí sé que te amo
y sé que si tú también me amas
qué mundo maravilloso sería este.

No sé demasiado acerca de la geografía
No sé demasiada trigonometría
No sé demasiado sobre el álgebra
No sé para lo que sirve una regla de cálculo.

Pero sí sé que uno y uno es dos,
y si esa uno pudieras ser tú,
qué mundo maravilloso sería este.

Ahora, yo no pretendo ser un estudiante de matrícula,
pero lo intento
porque tal vez siendo un chico estudiante de matrícula
pueda ganar tu amor.

No sé demasiado acerca de la historia
No sé demasiada biología
No sé demasiado sobre el libro de ciencia
No sé demasiado acerca del francés que estudié.

Pero sí sé que te amo
y sé que si tú también me amas
qué mundo maravilloso sería este.

Pero sí sé que te amo
y sé que si tú también me amas
qué mundo maravilloso sería este”.

 

¿Crees que se parecen?
[Total: 3 Media: 4]
(Visited 214 times, 1 visits today)

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *