LA POSIBLE COPIA
ALBERTO MONTERO: Puerto Príncipe
httpv://youtu.be/q_fm_Riw9X8
“Puerto Príncipe” es la canción que da título al disco de Alberto Montero del mismo nombre editado en 2013 por la discográfica BCore. Según la información proporcionada por esta, “la ciudad de Puerto Príncipe da nombre a una calle de Barcelona donde reside desde hace unos años Alberto Montero, compositor, cantante e instrumentista de origen valenciano que ha escogido este topónimo para titular de forma genérica su recién disco editado por BCore en 2013.
Para quienes estén familiarizados con su música, sabrán de sobras que se trata de uno de nuestros mejores músicos de folk cuya premeditada discreción y creatividad se compenetran para dar vida a un microuniverso en el que tienen cabida multitud de estilos que van del jazz a la psicodelia pasando por ritmos latinos, y donde se mezclan referencias variadas que le ayudan a expresarse con sensibilidad y una belleza tanto sonora como literaria.
Alberto Montero nació en Valencia y se crió en el Puerto de Sagunto. En el año 2000 forma una poderosa banda de psicodelia llamado Shake con los que graba dos álbumes titulados Let Me Wear the Morning Sun (2005) y Twilight Sleep (2009), editados ambos por Greyhead, discográfica que edita sus siguientes trabajos. En 2008 saca un disco a su nombre en el que potencia su vertiente más folk sin perder los elementos lisérgicos que distinguen sus composiciones.
En 2009 se traslada a Barcelona y con los Shake disueltos, continúa su carrera en solitario con un nuevo álbum titulado Claroscuro (2011) en el que la ciudad catalana y las inquietudes consecuentes a empezar una nueva vida adquieren un considerable protagonismo. Alberto canta por primera vez en castellano y en ese segundo álbum introduce sensuales elementos latinoamericanos que se suman a su completo y original abanico creativo. El disco cuenta con la colaboración de Jesse Sparhawk, de la banda de folk progresivo Fern Knight.
Puerto Príncipe se grabó casi todo entre el 28 de marzo y el 4 de mayo de 2013, en el mismo estudio que Claroscuro, El Sótano de Dani Cardona, en Valencia; y una parte en Manlay Studio, feudo del guitarrista de la banda que le acompaña, Román Gil. Ha sido masterizado por Enrique Soriano en Crossfade Mastering, de Valencia, y la producción ha corrido a cargo del propio Alberto y Román Gil que también se ha encargado de percusiones y bandoneón.
El resto del grupo que grabó el disco estuvo integrado por Marcos Junquera a la batería y Xavi Muñoz al bajo. También ha contado con la inestimable colaboración, en algunos de los temas, de Pau Rodríguez “PapaDuPau” (Za!) a la trompeta, e Isabel Fernández Reviriego (Aries, ex-Charades, voz y coros), además de Maya Fernández (flauta), Olga Beltrán (viola), Sonia Beltrán (cello) y Andrés Calatayud (violín). Destacar también que la portada es obra de El Señor Gómez y la Srta. Swallow.
El nuevo disco de Alberto Montero está repleto de rincones sorprendentes, entre pasajes melódicos que rezuman pasión a raudales, y modulados por una rítmica multiétnica. Emerge con un magnífico instrumental, titulado como el álbum, a modo de sinfonía onírica preludio de una encantadora ‘noche de verano’”.
EL ORIGINAL
THE INCREDIBLE STRING BAND: A Very Cellular Song
httpv://www.youtube.com/watch?v=V1e5gbHs9eo
La revista Rockdelux señala, en su edición de noviembre de 2013, que la canción “Puerto Príncipe” de Alberto Montero recuerda a “A Very Cellular Song” de The Incredible String Band.
El tema aparecía en The Hangman’s Beautiful Daughter, publicado en marzo de 1968, el tercer disco de The Incredible String Band, grupo escosés formado por los músicos Mike Heron y Robin Williamson, quienes tocaban una gran cantidad de instrumentos: flautas, cualquier instrumento de cuerdas, clavicordio, percusiones varias, armónica e instrumentos nada convencionales.
En este, su tercer álbum, un trabajo complejo en cuanto a estilos o estructuras, se utilizaron muchos instrumentos antiguos nada habituales en el mundo del rock: cítaras, arpas, cuerdas exóticas, percusiones, dulcémele, clavicordio, shehnai hindú, órgano de pipa, flautas… Partiendo de todo este arsenal de sonidos viejos y olvidados crearon un concepto totalmente vanguardista e innovador
De esta forma, el disco contenía una combinación alucinante de folclore escocés, música medieval y renacentista, pero también antillana, hindú, africana y del lejano Oriente, prácticamente sin instrumentos eléctricos, en canciones producidas por Joe Boyd, responsable también del sonido de, entre otros, Nick Drake, Vashti Bunyan o Fairport Convention.
Por su parte, las letras recuperaban viejas leyendas escocesas, historias de ambiente bucólico, cantos a la naturaleza, cuentos de brujas e historias mitológicas tratadas con inteligencia, poesía y humor, rescatando elementos milenarios de diversas culturas.