LA POSIBLE COPIA
EXTREMODURO: Jesucristo García
“Jesucristo García” es una canción de la banda de rock española Extremoduro, compuesta por su líder Roberto Iniesta e incluida en su álbum debut Tú en tu casa, nosotros en la hoguera, publicado en diciembre de 1989 por la compañía discográfica Avispa. Fue, también, la cara B del single “Decidí”, extraído del mencionado disco.
No sería la única vez que aparecería en un trabajo del grupo. Sin ir más lejos, y en una versión remezclada y con la incorporación de nuevos instrumentos, se incluyó en el disco Rock transgresivo lanzado el 26 de agosto de 1994, siendo la mayor novedad la participación de Iñaki ‘Uoho’ Antón en la guitarra,teclados y producción
No contentos con estas dos primeras grabaciones de la canción, el tema fue regrabado de nuevo he incluido en el álbum recopilatorio de la banda titulado Grandes éxitos y fracasos (Episodio primero), que fue publicado el 3 de mayo de 2004.
Esta es su letra:
Concreté la fecha de mi muerte con Satán.
Grandes éxitos y fracasos (Episodio primero)
Le engañé
y ahora no hay quien me pare los pies.
Razonar
es siempre tan difícil para mí.
Qué más da
si al final me sale todo siempre bien del revés.
Nací un buen día, mi madre no era virgen
no vino el rey, tampoco me importó
hago milagros, convierto el agua en vino
me resucito si me hago un canutito.
Soy Evaristo, el rey de la baraja
vivo entre rejas, antes era chapista
los mercaderes ocuparon mi templo
y me aplicaron ley antiterrorista.
¿Cuánto más necesito para ser dios?
¿Cuánto más necesito convencer?
Y perdí
la cuenta de las veces que te amé.
Desquicié
tu vida por ponerla junto a mí.
Vomité
mi alma en cada verso que te di ¿Qué te di?
Olvidé
me quedan tantas cosas que decir ¿Qué decir?
Por conocer a cuantos se margina
un día me vi metido en la heroína
y aún hubo más, menuda pesadilla
crucificado a base de pastillas.
¿Cuánto más necesito para ser dios?
EL ORIGINAL
RAMONCÍN: Un soldado
Tal y como nos indica Paco en el apartado de esta web destinado a proponer parecidos entre canciones, “Jesucristo García” de Prince recuerda a “Un soldado” de Ramoncín, canción incluida en su álbum Ramoncinco de 1984.
“Un soldado” de Ramoncín
En su página web, el disco se presenta así: “No es todo lo oscuro que a mí me hubiera gustado que fuese. Recuerdo cuando íbamos a tocar “Fabrica de hombres” a sitios como Euskadi, donde todo es más duro y tienes que elegir muy bien el repertorio, la reacción era acojonante”.
Efectivamente, Ramoncinco es el disco más oscuro, con una clara influencia del álbum de Springsteen Darkness of the Edge of Town. «Fábrica de hombres», incorporando guitarra acústica, ampliaba el espectro sonoro, «Marcado», con su carga de dramatismo y «Jugando mal», heredera de la novela negra, dejaban entrever influencias literarias, y los éxitos «Al límite» y «La chica de la puerta 16», escrita con el fallecido Pepe Risi de Burning, completaban un repertorio magnífico. El disco incluía también colaboraciones de Manolo Tena y Rosendo en la composición de “Nicaragua” y “La reina de la ciudad” respectivamente.
La participación de Ollie Halsall sigue siendo importante en la composición de las canciones aunque, a diferencia de Corta, es el propio Ramón quien dirige la producción del álbum. También es el debut de Antonio Molina, el guitarrista zurdo que formaría parte de la banda del artista durante toda su carrera posterior.
La afición por los cómics de Ramón –había colaborado escribiendo en publicaciones como El Víbora o FanComics- también se deja notar al incluir un encarte interior con un retrato del artista dibujado por Carlos Giménez, el autor de la inigualables series “Paracuellos” y “Los profesionales”, dos obras de referencia en el tebeo español”.
Esta es su letra:
“Romper el ritmo del corazón
“Un soldado” de Ramoncín
Bailar desnudo en la oscuridad
Cambiar de cuerpo al amanecer
Dejar de ser como los demás
No te dejes ver
Tienes que escapar
Te van a convertir
En un número más
Pisar el fuego con decisión
Gritar sin miedo a perder la voz
Matar la sombras de la pared
Cerrar los ojos y descansar
Saber que nunca te arrastrarán
No te dejes ver
Tienes que escapar
Te van a convertir
En un numero más
Sentir la muerte en un callejón
Robarle al cielo su caridad
Pensar que el mundo te asesinó
Volver a ser como los demás”.